lunes, 12 de mayo de 2014

SANTA FE: Vecinos de Playa Norte exigen por la recolección de residuos

Los habitantes denuncian que, a pesar de los reiterados reclamos, la empresa a cargo del servicio no cumple con sus tareas. La acumulación de la basura se produce a diario y genera malestar.
Diario UNO | 
Vecinos de Playa Norte exigen por la recolección de residuos

Años atrás la zona de Playa Norte era reconocida por su hermoso paisaje, que devolvía a quienes la visitaban una imagen de playa, río y naturaleza. Hoy esa postal sólo quedó en la memoria de los santafesinos que alguna vez pudieron disfrutar del lugar, ya que el escenario cambió drásticamente. Pastizales, basura y olores nauseabundos, es lo que se encuentra cuando se recorre “la playa”. Ante ese panorama, se puede afirmar que el olvido y la desidia se adueñó del territorio. Esta situación preocupa a los vecinos que se sienten presos de la inacción de las autoridades.
En diálogo con Diario UNO, los habitantes del lugar enumeraron las problemáticas que sufren a diario y aseguran que nadie colabora para solucionarlas. Inseguridad, falta de mantenimiento, ausencia de los servicios y lo que más preocupa: falta de repuestas. Ésas son sólo algunas de las cuestiones que le quitan el sueño a los vecinos de Playa Norte.
En los últimos meses, los esfuerzos de los habitantes de esa zona se centraron en evitar la acumulación de residuos en el acceso que va hacia la playa. Los desechos y la basura que se juntan con demasiada rapidez preocupa a los que viven en ese lugar.
“No pasa más el camión de la basura, no vienen más a juntarla”, dijeron los vecinos que habitan en las inmediaciones de la calle Riobamba al 8.600, en el barrio de Playa Norte. Desde hace un tiempo las malas condiciones en las que está el cableado y la inseguridad, provocaron que el servicio de recolección de residuos fuera suspendido por la empresa prestadora. Esa situación preocupa a los vecinos porque hoy se ven obligados a convivir con la basura.
A pesar de los reiterados reclamos que se hicieron ante la Municipalidad y ante la Secretaría de Medio Ambiente, la respuesta aún no llegó.
“Cuando uno hace el reclamo, viene la camioneta de la Municipalidad, junta y se va. Pero después hay que esperar, porque hasta que no se llena de basura de nuevo y uno vuelve a reclamar, no vienen de nuevo. Pero ahora ya ni eso”, relató entre indignada y cansada por el panorama una de las vecinas.
Hasta hace poco, el servicio se limitaba sólo a la recolección de los cestos particulares, pero la limpieza de la cava que hay en el lugar no se realiza. Los reclamos han sido reiterados a lo largo de cuatro años, pero éstos no tuvieron el efecto deseado por los habitantes del barrio.
Luego de una gran cantidad de llamados y gestiones ante organismos como la Secretaría de Medio Ambiente, la Defensoría del Pueblo y la Municipalidad, los vecinos fueron sorprendidos el miércoles pasado cuando en horas de la mañana un camión se acercó hasta el lugar para levantar parte de los residuos desparramados en la vía pública y frente a los hogares. Esta acción volvió a repetirse en horas de la tarde, cuando el vehículo retornó para retirar los residuos que estaban a la altura de la cava.
“Tuve que reclamar ante la Defensoría del Pueblo, a la Secretaría de Medio Ambiente, porque tenía un basurero en la puerta y había hasta un perro muerto frente a mi casa. La empresa tiene que cumplir con el servicio, nosotros pagamos los impuestos”, señalaron.
En diálogo con Diario UNO los vecinos confirmaron que los vehículos pertenecían a la Municipalidad. “Si uno no llama a los medios, en cualquier momento encontrás a un animal. Incluso a la tarde uno puede ver que se juntan los chicos a jugar en el basural”, expresó otra de las vecinas.
Ante los reiterados pedidos, desde la firma argumentaron que la baja altura de los cables que conforman el tendido eléctrico impide el ingreso del camión a la zona. A eso, se suma la denuncia de uno de los empleados que aseguró haber sido víctima de la inseguridad.
En la actualidad, los vecinos deben llevar adelante una enorme cantidad de reclamos para que sus pedidos sean escuchados y poder contar con el servicio aunque sea una vez a la semana.
“Antes el basurero venía todos los días. Hace cinco años empezaron a no querer pasar más y nosotros a tener que llamar y reclamar para que no se forme el basurero. Antes no pasaba esto”, explicó una señora que vive en la zona.
Este reclamo forma parte de una situación social que es real y complicada. Los vecinos son conscientes de esto pero al mismo tiempo reclaman que se cumpla con satisfacer las necesidades y brindar los servicios básicos para todos los habitantes del lugar. “Es una cuestión ambiental, acá se junta basura muy rápido. Es un foco de infección muy grande y uno puede ver ratas enormes en el lugar”, agregó otra de las personas que se sumó al reclamo.
La seguridad
Tiros, allanamientos, amenazas y secuestros de armas en el barrio son escenas repetidas para quienes viven en el lugar. “La ultima vez vino caballería, pusieron dos agentes montados. Estuvieron dos meses y después se los llevaron”, relató una de las vecinas al momento de contar cuál es la situación que se vive en el barrio.
En la actualidad, muchos se ven obligados a tomar recaudos especiales al momento de realizar algún movimiento, sea al llegar o salir de su casa. Algunos optaron por equiparse con sistema de monitoreo y alarma para evitar grandes sorpresas. La situación de inseguridad impacta directamente en la rutina de muchos. “Ahora no entra ni el recolector de basura, ni el remisero, ni las ambulancias. No vienen ni a traerte una carta, nada”, ejemplificaron.
En un contexto en que los propios involucrados describieron como “complicado”, los vecinos manifestaron sentirse agotados por la cantidad de pedidos y denuncias que se ven obligados a llevar adelante para contar con la atención de los funcionarios. 

No hay comentarios:

Publicar un comentario