El jefe de la policía departamental de Nogoyá, Entre Ríos, Sergio Rebolloso, declaró que la adolescente de 16 años que fue rescatada el domingo pasado de una red de trata que la obligaba a prostituirse en carreras de Turismo Carretera es santafesina y no oriunda de la ciudad de Rosario como se informó en un primer momento. Pero además, expresó que parte de la familia de la víctima era “cómplice” y sabía de la actividad a la que la joven era sometida.
“A la chica de 16 años no se la pudo poner a disposición de la familia porque había también una situación de complicidad familiar”, expresó el oficial alertando sobre otra agravante circunstancia. En este sentido, en diálogo con Diario UNO, el subsecretario de Niñez de la provincia de Santa Fe, Cristian Allende, confirmó que su cartera ya está interviniendo en el caso y que solicitaron los informes correspondientes a la Justicia entrerriana: “Estamos trabajando juntos con la Secretaría de Derechos Humanos de Entre Ríos. Lo primero será definir a cargo de quién va a quedar la adolescente y proveerle la asistencia correspondiente para este tipo de casos. Fue asistida por un equipo interdisciplinario del Consejo Provincial del Niño, el Adolescente y la Familia (Copnaf), primero en Nogoyá y luego en Paraná”, indicó ayer el funcionario.
El operativo policial ocurrió el domingo a la noche en Nogoyá, cuando 17 personas (13 mujeres, tres travestis y la adolescente) volvían, en tres autos, de la carrera de TC disputada el fin de semana en Concepción del Uruguay, Entre Ríos.
Al ser interrogados en el puesto caminero, los ocupantes de los vehículos confesaron que se dedicaban a la prostitución. El hecho que los complicó fue la presencia en los asientos de la chica de 16 años, quien reconoció que había ofrecido sexo a asistentes del evento desarrollado en el autódromo de La Histórica.
“La chica es de Santa Fe al igual que gran parte de los integrantes del grupo que demoramos. Había 13 prostitutas, tres travestis y una adolescente que iban a ejercer la prostitución a eventos como el TC”, amplió Rebolloso durante la entrevista. La adolescente, aparentemente, había sido reclutada hacía poco para la venta de sexo y en su testimonio dijo que “estaba ejerciendo la prostitución en contra de su voluntad”. También contó que formaba parte de “una red de prostitución nacional”. El operativo policial fue el desenlace de una investigación que había arrancado el viernes de la semana pasada por un hecho colateral. Ese día a la tarde el grupo se detuvo por un momento en una estación de servicios de Nogoyá ubicada sobre la ruta. En ese lugar uno de los viajeros robó un teléfono celular que estaba en el comedor de la estación.
El dueño del comercio denunció la sustracción a la policía, que al revisar las imágenes de las cámaras de seguridad de la estación pudo identificar a los vehículos en los que se movilizaban y las chapas patentes. La noche del domingo los tres vehículos, un Chevrolet Astra, un Renault Duster y un Fiat Siena, anotados por la policía, regresaban desde la costa del río Uruguay y fueron detenidos en el puesto caminero. A los agentes les llamó la atención el grupo de cinco jovencitas que viajaba en uno de los vehículos y decidieron trasladar a todos a la Jefatura Departamental para corroborar sus identidades.
En el caso interviene la fiscal federal de Victoria, Marina Herbel, luego de que el fiscal de Nogoyá, Agustín Gianini, se declarara incompetente. El fondo de la investigación será determinar si se trató de una organización que reclutaba mujeres para obligarlas a ejercer la prostitución. “La joven confesó que estaba contra su voluntad, que había sido reclutada en un barrio marginal de Rosario y sometida sexualmente por un proxeneta que la obligaba a prostituirse también en la autopista Santa Fe-Rosario”, detalló Rebolloso.
DIARIO UNO.
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