La policía comenzó a investigar la desaparición de varios elementos, entre ellos la leche que se distribuye a los niños más pobres de la ciudad, y lograron detener a la autora de los robos reiterados.
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La policía comenzó a investigar la desaparición de varios elementos, entre ellos la leche que se distribuye a los niños más pobres de la ciudad, y lograron detener a la autora de los robos reiterados.
Las denuncias comenzaron el 30 de diciembre de 2013 cuando la Doctora. Noemí Piazza, del CAPS de barrio Ombusal, en Reconquista, contó a los policías que se habían llevado un TV de 32 pulgadas con control remoto, una CPU completa, un teléfono celular y un teléfono fijo.
El 15 de enero Sandra Fabiana Aranda, enfermera del CAPS de barrio Guadalupe denunció que se habían llevado dos computadoras con monitores e impresoras y hasta los estabilizadores, teclados, parlantes y los mousses. Además se llevaron 11 kilos de leche Sancor.
La última denuncia fue el 29 de enero donde Gabriela Soledad Ortiz del CAPS de barrio Guadalupe relató que habían robado leche en polvo larga vida marca Sancor desde el interior del edificio y sin romper absolutamente nada.
Los policías comenzaron a investigar los hechos y se pudo establecer que la enfermera Karina Salinas, de 34 años, no sería ajena a los hechos denunciados y se procedió al arresto. Cuando el juez tuvo el expediente en sus manos decidió que quede "detenida e incomunicada" por "hurtos reiterados".
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