Sabado a la tade: Otra niña baleada en Alto Verde

Otra vez una menor de edad fue baleada en Alto Verde. 

El grave suceso ocurrió durante la tarde de la víspera y tuvo como escenario la manzana Nº 7 del citado distrito costero.

Por dicho sector se encontraba Agustina Monje, de 15 años, cuando un grupo de malvivientes armados comenzó a los tiros. Testigos del episodio aseguran que los rufianes abrieron fuego parapetados detrás del terraplén.

Muchos de los disparos “zumbaron” por sobre las cabezas de varios chicos que se encontraban disputando un “picado” de fútbol, en la canchita existente detrás de la Iglesia.

La misma aterradora escena se dio entre quienes observaban dicho partido. 

Fue uno de esos disparos el que impactó en el cuerpito de Agustina, que cayó al suelo tomándose su pierna izquierda. 

Lo que siguió a partir de entonces fue todo una locura. Personas corriendo hacia todas las direcciones tratando de buscar algún refugio.

Mientras, los autores de la demencial acción seguían haciendo de las suyas.

Minutos después, llegaron agentes de la seccional 24ª aunque el lugar ya era dominado por la confusión y el desconcierto.

Escenas dramáticas se observaron también en el dispensario de la zona que en contados segundos se llenó de gente y de personal uniformado.

Poco después se supo que la niña había sido llevada hasta el hospital José M. Cullen donde recibió las curaciones del caso.

Indignación

Lo ocurrido desató la indignación de muchos de los vecinos del distrito que se mostraron hartos de los hechos de violencia. 

“No sé hasta cuándo vamos a seguir así. Lo de ayer a la tarde fue una locura total. Tiraban hacia donde estaba la gente. Hasta la jornada de fútbol se debió suspender”, dijeron a este diario.

Otro de los entrevistados apuntó que “todo el mundo sabe quiénes son los que andan a los tiros ¿Por qué la policía no los va a buscar? Hay que sacarles las armas y meterlos presos”, sentenciaron.

Buena familia

El enojo de los vecinos se hacía mucho mayor cuando recordaban que la familia Monje es muy querida y respetada en el barrio.

“Son gente de trabajo de toda la vida. Es injusto que esté pasando todo esto. Están atacando a la gente buena. Están dejando hacer desastres acá”.

Tercer caso

Agustina Monje es la tercera víctima inocente que se cobra la violencia callejera en Alto Verde.

* La noche del miércoles 15 de enero, Federico Andrés Martínez se encontraba en la vereda de su casa en la Manzana 2 del barrio Alto Verde cuando un hombre que pasaba en moto intercambió disparos con alguien que se encontraba cerca de allí.

Un segundo después de escuchar uno de los estruendos, el pequeño de 8 años cayó al piso. Perdió mucha sangre y fue trasladado de urgencia por un vecino primero al Cullen y luego al hospital de niños Orlando Alassia.

A su ingreso le diagnosticaron hemoneumotórax y tras recibir la asistencia de urgencia el pequeño quedó internado.

El proyectil que lo hirió ingresó a su cuerpo por la parte posterior del tórax -espalda- y salió por la axila izquierda.

En su recorrido, la bala lesionó una parte del pulmón, lo que obligó a colocarle drenajes al paciente.

* El viernes 29 de noviembre de 2013, Serena Martínez fue herida. La pequeña de 6 años recibió un impacto de bala en la cabeza cuando participaba de la fiesta de despedida del Jardín Deportivo del Club Regatas. Junto a ella había más de un centenar de niños que al igual que toda la comunidad de esa institución no olvidarán esa triste tarde.

Eran cerca de las 18, cuando dos disparos -que resultaron ser de un arma calibre 9 milímetros-, producto de un enfrentamiento entre un grupo de personas en el distrito costero de Alto Verde, impactaron en dos personas: uno hirió a Serena, en la cabeza, y otro lesionó a un encargado de un galpón de depósito vecino al Club Excursionistas.

Serena murió la noche del 5 de diciembre.
Fuente El Litoral.