La directora del hospital de Niños "Orlando Alassia" de la ciudad de Santa Fe, Raquel Cociclio, dio a conocer en un informe algunas aclaraciones a la población ante informaciones difundidas por diferentes medios, que pueden confundir a la comunidad respecto a la presencia de roedores en la Institución.
Al respecto, precisó que el 5 de abril pasado por la mañana y ante lo referido por el personal del Archivo de Historias Clínicas de la presencia de roedores en las instalaciones del mismo,en el sector que se encuentra en el exterior del edificio hospitalario, se convocó a la Dirección de Zoonosis de la Provincia y a la empresa que realiza el control de plagas en la Institución.
Dos agentes de la referida Dirección, la Jefa del Sección de Vectores y acompañante realizaron durante la mañana una inspección en terreno, constatando excremento de roedores y la presencia de cebos rodenticidas monodosis que ya habían sido colocados por la empresa control de plagas.
Reafirmaron entonces las indicaciones de seguridad dadas por Epidemiología (similares a las implementadas durante la inundación de 2003 y posterior regreso al Hospital, como uso de barbijo, guantes, etc.), indicando simultáneamente la limpieza y desinfección con humo especial que es realizada por la empresa de control de plagas, dejando el sector cerrado por 1 hora y a 4 horas de su apertura una nueva limpieza.
Por tales razones, se "recomendó continuar con el uso de guantes y barbijos durante la siguiente semana" y ante la aparición de roedores muertos retirarlos según normas, repetir las desinfecciones y vigilar el estado de los cebos.
Se aclaró que este tratamiento requiere ser sostenido un tiempo, generalmente un mes, durante el cual pueden aparecer animales muertos.
Asimismo, se revisaron los espacios que pudieran dejar comunicación al exterior y ante la preocupación de trasmisión de enfermedades a través de roedores, esencialmente leptospirosis, se aclara que "al secarse, la leptospira se destruye y luego del método utilizado para la posterior desinfección no se corre riesgo de contraer ninguna enfermedad asociada a los roedores o productos químicos utilizados".
En su informe, la conducción del hospital de Niños Alassia destacó que en el transcurso de estas tres semanas se repitieron todas las acciones antes referidas y en el día de ayer, el director de Zoonosis de la Provincia, Javier Colombo, realizó personalmente una inspección y evaluación en terreno emitiendo un informe que coincide con el de la empresa de control de plagas.
Es decir, comprueba la existencia de cebos rodenticidas que "no muestran signos de consumo por lo que inferimos que la población de roedores está en disminución; tampoco se observó la presencia de roedores muertos".
Para seguridad y tranquilidad de todo el personal y de la comunidad que concurre al mismo, la Dirección del hospital reiteró su compromiso de mantener activa la funcionalidad de todas las áreas y especialmente las de Higiene, Seguridad y Epidemiología.
Finalmente, la dirección puso de relieve como es su "compromiso permanente con el personal, reiterarle su solidaridad y esfuerzos para mantener y acrecentar la eficiencia, calidad y prestigios en la región".
Dos agentes de la referida Dirección, la Jefa del Sección de Vectores y acompañante realizaron durante la mañana una inspección en terreno, constatando excremento de roedores y la presencia de cebos rodenticidas monodosis que ya habían sido colocados por la empresa control de plagas.
Reafirmaron entonces las indicaciones de seguridad dadas por Epidemiología (similares a las implementadas durante la inundación de 2003 y posterior regreso al Hospital, como uso de barbijo, guantes, etc.), indicando simultáneamente la limpieza y desinfección con humo especial que es realizada por la empresa de control de plagas, dejando el sector cerrado por 1 hora y a 4 horas de su apertura una nueva limpieza.
Por tales razones, se "recomendó continuar con el uso de guantes y barbijos durante la siguiente semana" y ante la aparición de roedores muertos retirarlos según normas, repetir las desinfecciones y vigilar el estado de los cebos.
Se aclaró que este tratamiento requiere ser sostenido un tiempo, generalmente un mes, durante el cual pueden aparecer animales muertos.
Asimismo, se revisaron los espacios que pudieran dejar comunicación al exterior y ante la preocupación de trasmisión de enfermedades a través de roedores, esencialmente leptospirosis, se aclara que "al secarse, la leptospira se destruye y luego del método utilizado para la posterior desinfección no se corre riesgo de contraer ninguna enfermedad asociada a los roedores o productos químicos utilizados".
En su informe, la conducción del hospital de Niños Alassia destacó que en el transcurso de estas tres semanas se repitieron todas las acciones antes referidas y en el día de ayer, el director de Zoonosis de la Provincia, Javier Colombo, realizó personalmente una inspección y evaluación en terreno emitiendo un informe que coincide con el de la empresa de control de plagas.
Es decir, comprueba la existencia de cebos rodenticidas que "no muestran signos de consumo por lo que inferimos que la población de roedores está en disminución; tampoco se observó la presencia de roedores muertos".
Para seguridad y tranquilidad de todo el personal y de la comunidad que concurre al mismo, la Dirección del hospital reiteró su compromiso de mantener activa la funcionalidad de todas las áreas y especialmente las de Higiene, Seguridad y Epidemiología.
Finalmente, la dirección puso de relieve como es su "compromiso permanente con el personal, reiterarle su solidaridad y esfuerzos para mantener y acrecentar la eficiencia, calidad y prestigios en la región".
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