Mientras el propio Ángel Sciara salió a desestimar públicamente rumores de renuncia, el Gobernador Antonio Bonfatti cuestionó que la oposición "vea todo negro" y desmintió que la Casa Gris tenga "un plan B" como lo había afirmado el titular de la cartera económica en caso de que las modificaciones impositivas naufraguen en el proceloso mar legislativo.
La Capital |
El paso del ministro de Economía, Angel Sciara, por la presidencia de Diputados para defender el proyecto de reforma tributaria, que ya tiene fecha de tratamiento en la Cámara baja el jueves 6 de septiembre, siguió generando ruido ayer en la capital santafesina.
Mientras el propio Sciara salió a desestimar públicamente rumores de renuncia, el gobernador Antonio Bonfatti cuestionó que la oposición "vea todo negro" y desmintió que la Casa Gris tenga "un plan B" como lo había afirmado el titular de la cartera económica en caso de que las modificaciones impositivas naufraguen en el proceloso mar legislativo.
"Leí que algunos periodistas le preguntaban, entrelíneas, al gobernador cuándo me iba a pedir la renuncia. Creo que se van a quedar con las ganas", dijo en tono divertido el ministro Sciara en declaraciones a La Ocho.
El ministro aludió en el reportaje radial a las picantes manifestaciones que había vertido en la mañana de ayer el gobernador Bonfatti cuando los cronistas acreditados en la Casa Gris lo consultaron sobre la situación económica de la provincia y, particularmente, sobre la visita de Sciara a la Cámara de Diputados en la tarde del miércoles.
"Yo no conozco ningún plan B", aseveró Bonfatti cuando le preguntaron sobre la afirmación que había vertido Sciara ante los legisladores respecto de un supuesto plan alternativo para sanear las finanzas provinciales en caso que el mensaje del Ejecutivo sobre reforma tributaria, que ya sufrió recortes significativos en la media sanción del Senado, no traspase con éxito el cedazo parlamentario. Y cuando se le repreguntó sobre aquella afirmación del titular de Economía, Bonfatti completó enigmático esbozando una sonrisa: "Está bien, para eso es el ministro".
El jefe del Ejecutivo volvió a reiterar que "hemos repetido hasta el cansancio" que no hay posibilidades de discutir nuevos aumentos salariales y al ponderar su gestión de gobierno Bonfatti replicó las críticas de la oposición parlamentaria: "Si se ponen anteojos negros, van a ver todo negro".
Según manifestó ayer Sciara, lejos de estar pensando en renunciar, "estoy cada vez más entusiasmado, creo que esta es la mejor manera de terminar un período de mi historia intelectual y política que me gratifica enormemente". Además consignó que "nunca me consideré un tipo imprescindible, yo trabajo para un proyecto político, que cree en la política en un sentido estricto".
"Acaso haya algunos a los que no les cae bien que yo figure en el Libro Guiness por haber estado tantos años en un cargo público, pero yo estoy gratificado de haberlo podido hacer y lo voy a seguir hasta que el gobernador disponga", clausuró la cuestión.
Sciara evaluó también sobre el encuentro con los diputados, que se trató de "un debate muy civilizado, que nos permitió, como Ejecutivo, dar a conocer cuál es nuestra concepción de la administración financiera del Estado, y ahí tenemos diferencias, que creo que son insalvables, conceptuales, y de ahí venían las preguntas de algunos de los diputados", opinó Sciara.
"Me preguntaron si yo me acordaba cuánto habíamos gastado en bienes de consumo en el año 2010... la verdad es que llevar al ministro de Economía para preguntarle esas cosas, no tenía mucho sentido", cuestionó el ministro a algunos interlocutores parlamentarios que arrojaron dardos sobre su gestión.
Finalmente, el titular de Hacienda afirmó que no concurrió al Palacio de las Leyes para "tratar de convencer a nadie, fui simplemente a exponer la posición del Ejecutivo, lo que estamos haciendo desde el Ministerio de Economía para administrar en una situación de crisis, me puse a disposición de los diputados para lo que quisieran", concluyó.
No hay comentarios:
Publicar un comentario