Foto:Archivo El Litoral
DyN
La tasa de mortalidad por suicidios supera la de homicidios en Argentina, advirtieron especialistas, y exhortaron a "no banalizar" los intentos por quitarse la vida, al asegurar que el 20% de las personas que lo intentó una vez "vuelve a realizarlo al año".
Los suicidios tienen una tasa de 7.2 cada 100 mil habitantes, según cifras del ministerio de Salud citadas en un informe difundido por el Instituto de Neurociencias Buenos Aires (Ineba) en el marco del Día Mundial para la Prevención del Suicidio, que se conmemora mañana.
El estudio sostuvo que "la cifra supera a la de muerte por homicidios, que actualmente es de 5.2" en el país. "El ahorcamiento es uno de los métodos más usados en ambos sexos, mientras que el envenenamiento predomina en mujeres y el uso de armas de fuego, en hombres", reportó la investigación.
El director de Psiquiatría y Saud Mental de Ineba, Horacio Vommaro, explicó que "en la prevención del suicidio hay que tener en cuenta la modalidad clínica con la que se presenta". "En ningún caso hay que banalizar el intento suicida, ya que el 20% de las personas que lo intenta una vez, vuelve a realizarlo al cabo de un año y el 50%, luego de cinco", destacó el especialista.
En ese sentido, expresó que "es importante valorar la gravedad y la probabilidad de reiteración a través de considerar diferentes factores" y mencionó la "severidad del intento suicida (impulsivo o premeditado), la gravedad de la tentativa autolítica (método utilizado), la historia personal y/o familiar y los factores socio-culturales".
Vommaro consideró "fundamental" evaluar "la red vincular, comenzando por la familia y los vínculos significativos" de las personas que intentan suicidarse. "En los intentos o suicidios de menores hay que considerar el sentimiento de desvalimiento, de des-auxilio y de des-ayuda correspondiente a sentir que el otro del cual dependen los cuidados básicos no responde al llamado", dijo el especialista.
El director de Psiquiatría y Saud Mental de Ineba advirtió la importancia de prevenir los suicidios y, en ese sentido, pidió "tener en cuenta algunas conductas que indican posibilidades de riesgo". "Estas conductas pueden manifestarse como retraimiento, apatía, encierro y trastornos del sueño", expresó el especialista ,y pidió permanecer en alerta "cuando hay reiteradas alusiones a la muerte o amenazas de suicidio o sentimientos de angustia y desesperanza".
Asimismo, explicó que la consulta temprana permite prevenir intentos futuros y la organización de la estrategia terapéutica más adecuada para cada situación.
La Organización Mundial de la Salud (OMS) define el suicidio como "el acto deliberado de quitarse la vida" y manifiesta que se trata de "un acto de violencia que genera para los individuos, las familias, las comunidades y los países, graves consecuencias, tanto a corto como a largo plazo, provocando efectos perjudiciales en los servicios de atención de salud".
Un millón de personas se suicida en el mundo por año, reportó el informe y advirtió que el número de decesos "aumenta considerablemente en adolescentes y jóvenes y es un acto que se da más en hombres que en mujeres". "El suicidio es una de las tres primeras causas de defunción en el grupo de personas de entre 15 y 44 años y es la segunda causa de fallecimientos en el grupo de niños y jóvenes de entre 10 y 24 años", sostuvo el reporte.
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