Asumió el nuevo jefe de la fuerza Lifschitz defendió hoy a la Policía de Santa Fe y le renovó la confianza

A 24 horas de la reunión con Patricia Bullrich para coordinar el arribo de fuerzas federales, el gobernador dijo que “no resignará” el lugar “que le corresponde a la institución local. Pidió que las órganos del Estado “se miren hacia adentro” y hagan “autocrítica”.

El nuevo jefe, José Luis Amaya, manifestó su compromiso público de que “todos y cada uno de los minutos en los que esté en este cargo estarán dirigidos con todo mi esfuerzo a intentar dar respuestas a lo que hoy nos exige la sociedad”. Foto: Flavio Raina

Ivana Fux
ifux@ellitoral.com

“No vamos a resignar el lugar que le corresponde a la fuerza de Santa Fe”. En un contexto ordinario, la frase que esta mañana pronunció el gobernador Miguel Lifschitz hubiese sido casi de circunstancia. Pero se produjo en un ámbito especial -el acto por el aniversario 152º de la institución policial-, a minutos de haber puesto en funciones a un nuevo jefe de la fuerza, y a sólo 24 horas de la reunión con la ministra de Seguridad de la Nación, Patricia Bullrich, donde uno de los temas abordados fue, precisamente, la injerencia que tendrá dicha cartera en las políticas de seguridad pública de Santa Fe, si finalmente los gendarmes desembarcan en la provincia.

 

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Asume José Luis Amaya acto 152º aniversario de la creación de la Policía de Santa Fe

 Lifschitz no pudo anunciar medidas concretas después del encuentro en Buenos Aires, de donde esperaba irse con algún grado de precisión respecto de la cantidad y plazos del eventual arribo de fuerzas federales. Bullrich habló de la necesidad de aplicar un plan integral” en la materia para evitar un nuevo “parche”, pero donde la Nación sea partícipe directo de las decisiones que se adopten.

 Por eso, el gobernador hilvanó esta mañana en su exposición los diferentes eslabones de la compleja realidad de los últimos días. Ante lecturas de un posible desplazamiento de las fuerzas provinciales frente a un mayor protagonismo de las federales, Lifschitz fue elíptico y no citó a la Nación, pero defendió a la institución policial santafesina y públicamente le ratificó su confianza. “Les hablo como gobernador pero también como un integrante más de la fuerza; me pongo en su lugar. Entiendo sus demandas y entiendo su indignación cuando reciben críticas infundadas”, se solidarizó.

Ante el flamante jefe de la fuerza (ver aparte), el gobernador pidió “mayor trabajo en equipo”, y prometió “no escatimar recursos para que, más allá de las restricciones presupuestarias, podamos tener la mejor Policía de Santa Fe”. “La situación de violencia y delito de hoy tiene que ver con múltiples causas, de las que no son ustedes responsables directos”, afirmó.

Responsabilidades

 Tras elogiar y alentar a las fuerzas provinciales, el gobernador aludió a otros hechos y actores concretos de la situación actual. “Queremos coordinar tareas con Nación y con las fuerzas federales, porque delitos como la trata o el narcotráfico sólo pueden combatirse con la coordinación de los tres niveles del Estado”, dijo el mandatario a propósito de lo conversado ayer con Bullrich. Y a renglón seguido aseguró que “no vamos a resignar el lugar que le corresponde a las fuerzas de Santa Fe. Cada uno tiene que hacerse cargo de la parte que le corresponde -sostuvo-. Quiero transmitirles nuestra confianza. Les pido un mayor esfuerzo y una mayor dedicación porque necesitamos bajar los niveles de violencia e inseguridad”, sentenció.

Lifschitz se dirigió a otro de los estamentos apuntados por la sociedad en el clamor de miles de rosarinos que hace una semana coparon las calles de esa ciudad: la Justicia.

“Vamos a seguir trabajando con el Poder Judicial, porque tenemos un nuevo sistema procesal penal del que nos sentimos orgullosos, y lo vamos a acompañar para que sea más efectivo y para que todo aquel que cometa un delito tenga la pena que le corresponde”. Lifschitz recogió el guante después de aquella conmovedora marcha y dijo que “ésa es la señal que nos piden los ciudadanos; ésa es la señal (la de la coordinación de los poderes) que quieren ver todos esos vecinos de Rosario que se concentraron en una marcha numerosa”.

En el mismo sentido, reclamó “que las instituciones del Estado se miren hacia adentro y hagan autocrítica; que nos sirva para salir fortalecidos y para demostrar que podemos dar las respuestas que nos piden, que tenemos la capacidad, la fuerza y el compromiso para hacerlo. Estoy seguro de que lo vamos a lograr”, concluyó.

Recambio

 Antes del acto para conmemorar un nuevo aniversario de la institución policial, el gobernador puso en funciones en el Instituto de Seguridad Pública a la nueva cúpula policial provincial. Asumieron el director general, José Luis Amaya, como titular; y el director general, José Pérez, como subjefe.

Se trata del segundo cambio de cúpula en ocho meses de gestión. En diálogo con la prensa, Lifschitz dijo que había “plazos y objetivos que corregir”. “Tenemos una propuesta de trabajo y un plan que estamos desarrollando, pero jugamos en una cancha barrosa, donde también están el narcotráfico y la delincuencia. Todo esto nos obliga a ir ajustando plazos y a ir exigiendo nuevas respuestas”, explicó.

Amaya, por su parte, admitió que a veces “no es suficiente” el trabajo policial que se hace, pero consultado sobre la llegada de Gendarmería respondió: “Si me preguntan cuál es mi mayor anhelo, les digo que es que con la Policía de Santa Fe se cubran todas las expectativas que el vecino tiene. Si vienen otras fuerzas y es necesario, bienvenido sea. No soy quién para opinar en contra”, concluyó.