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domingo, 17 de julio de 2016

Radarizarán las rutas 6 y 70, que atraviesan y complican a Esperanza

La medida fue impulsada por el municipio. Comenzarán a funcionar en 15 días y el límite será de 60 km/hora. La sincronización de los semáforos promete darle mayor fluidez al tránsito y seguridad vial.
/UnoSantaFe | 
Radarizarán las rutas 6 y 70, que atraviesan y complican a Esperanza

 La dificultad se presenta en varias localidades de la provincia. El crecimiento de las ciudades y de los pueblos termina atrapando a las rutas más transitadas e importantes que pasan por Santa Fe. La situación de Esperanza no es un caso aislado. La ruta 70 atraviesa en forma completa toda la ciudad, ya que su desarrollo urbanístico se consolidó a partir de esa vía. De esta forma, conviven sobre esa arteria el tránsito urbano y la circulación de vehículos que transitan por la ruta a alta velocidad.
En 15 días aproximadamente, y a través de un convenio con la Agencia Provincial de Seguridad Vial, la Municipalidad de Esperanza va a tener en funcionamiento tres radares. Dos de ellos estarán ubicados en la ruta 70, tanto al ingreso como a la salida de la ciudad, y uno más sobre la ruta 6, del lado sur. Permitirán una velocidad máxima de 60 kilómetros por hora. Además, se sincronizarán los semáforos en el centro de la ciudad para que el tráfico mantenga fluidez.

Desde la Municipalidad de Esperanza aseguran que el objetivo no es recaudatorio y que "preservar la seguridad vial" es el principal propósito. Además, informaron que los primeros días serán informativos y de toma de conciencia, aunque advierten: "Para aquellos que no tienen apego a la norma, existe la sanción como medida correctiva. Esperemos no tener que sancionar a nadie".

El secretario de Gobierno de Esperanza, Alfonso Gómez, describió: "Ya está la instalación hecha, está el sistema aprobado, los radares están calibrados. Está terminado, solamente queda un proceso que es administrativo". En este sentido, informó que solo resta elevar una nota a la Agencia Provincial de Seguridad Vial (APSV), indicando el inspector autorizado por la Municipalidad para labrar las actas. "Esa nota fue enviada y es el último trámite que nos faltaba como para que se pueda poner en funcionamiento", dijo.

El secretario de Gobierno fundamentó la decisión municipal y comentó que el objetivo es establecer un límite de velocidad a partir de los radares y de la sincronización de semáforos. "Establecimos desde el Arco de la Colonización (ingreso a la ciudad) hasta la salida, una velocidad máxima a 60 kilómetros por hora (km/h). Lo vamos a hacer, primero con los radares y después, dentro de la ciudad, con una semaforización. Va a estar sincronizado para que actúe como onda verde a la misma velocidad".

Con respecto al valor de las multas, indicó que las mismas se regulan a través de la APSV y tendrán el mismo costo que los otros ubicados en rutas provinciales. Sobre la administración del sistema, añadió: "Lo va a administrar el municipio y es coparticipable. Una parte va para la Agencia Provincial y otra para la Municipalidad. Las actas las labra un inspector municipal, después de que la emite el sistema. Así que toda la tramitación queda bajo la responsabilidad del municipio".

Sobre los problemas de tránsito que registra la localidad, el secretario de Gobierno resaltó: "La ciudad está atravesada por la ruta. A unas pocas cuadras de todo lo conforma el centro neurálgico de la ciudad, el centro comercial, todo está acompañado por la ruta 70. La ciudad se fue consolidando en ese eje, a la vera de la ruta. Hay muchas familias que utilizan la ruta como único medio de acceso para llegar a sus hogares".

Por otro lado, hizo referencia a la confluencia de vehículos que genera este escenario. "Es un lugar incompatible. Por un lado, las familias que quieren venir de una casa hacia el centro y al mismo tiempo, un vehículo a alta velocidad que viene transitando la ruta", planteó.

Acerca de la puesta en vigencia de los radares, el funcionario resaltó que habrá un período de adaptación y aclaró: "Va a haber primero una etapa de información y de toma de conciencia".
Consultado por aquellos que piensan que una medida de este tipo solamente tiene un propósito recaudador, señaló: "Queremos evitar precisamente multar sin sentido a la gente. Lo que estamos buscando es preservar la seguridad. Creo que nadie va a perder absolutamente nada de tiempo por transitar a una velocidad razonable en el tramo urbano a 60 kilómetros por hora. Siendo respetuoso de la norma, no tiene por qué haber algún tipo de sanción. Es una velocidad que permite transitar en forma constante".

Por último, el funcionario concluyó: "Creo que si todos somos responsables y nos comprometemos con el problema del tránsito, no solo en la ciudades sino en las rutas, me parece que lo sancionatorio pasa a un segundo plano".

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