jueves, 19 de mayo de 2016

En Fomento 9 de Julio Fue a visitar a su nieta y cuando regresó su casa estaba saqueada

La víctima es un jubilado de 76 años. Delincuentes entraron a su casa de 9 de Julio 4400. Se llevaron algunos objetos de valor y ropa.

Foto: Danilo Chiapello

Danilo Chiapello
dchiapello@ellitoral.com

Este miércoles por la tarde, a la tarde, Fulvio Medina (76) salió de su domicilio, en barrio Fomento 9 de Julio, para ir a visitar a su hija y a su pequeña nieta.

Pero al regresar de dicho encuentro, quedó de frente a un hecho que le golpeó el alma: ladrones habían ingresado y robado en su casa, ubicada en 9 de Julio al 4400.

El o los delincuentes, primero violentaron un modesto portón de rejas que da a la vereda. Acto seguido rompieron el vidrio de una ventana, lo que les franqueó el acceso directo al inmueble.

Una vez en el interior de la vivienda, sustrajeron una bicicleta, electrodomésticos, varias prendas de vestir y dos cajas con alimentos.

“Quizás algunos piensen que son cosas sin importancia, pero para mí que soy un jubilado todo lo que me han sacado tiene mucho valor”, dijo esta mañana Fulvio en diálogo con El Litoral.

“Todo pasó cerca de las 19, cuando salí de mi casa para ir a visitar a mi hija y mi nieta. Estuve un rato, donde la pasamos muy bien y regresé. Pero cuando llegué a mi casa encontré el portillo abierto, entonces ya me imaginé que algo malo había pasado.

“Me puse a mirar y vi que el vidrio de una ventana estaba abierto. Abrí la puerta y me di cuenta de que me faltaba una bicicleta, que para mí tiene un altísimo valor porque es un regalo de mi padre. También me llevaron un reloj, que era un obsequio de mi hijo, varias prendas de vestir y dos cajas de dulces.

“Ahora estoy limpiando, porque dejaron un desorden importante. Revisaron por todos lados buscando no sé qué... si yo soy un jubilado.

“No es la primera vez que me roban. Ya sufrí varias ‘entraderas’, en una de las cuales hasta me lastimaron y quedé internado. No sé qué es lo que está pasando en este barrio. Los robos son moneda corriente y todos los días nos enteramos de algo. Yo ya no sé cómo defenderme, y al resto de los vecinos les pasa lo mismo”, sentenció.

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