Durante la jornada de ayer, el juez penal Sergio Carraro dictó la prisión preventiva para L.E.M., uno de los tres imputados de haber cometido el robo en el destacamento de la Policía Comunitaria, ocurrido el pasado 7 de diciembre en la esquina de Juan Díaz de Solís y Salta. El pedido había sido realizado por el fiscal de la causa, Gustavo Urdiales, quien imputó a tres hombres por considerarlos autores y coautores del delito de “robo calificado por el uso de arma de fuego agravado por la intervención de un menor de edad”.
La audiencia se realizó en dos tramos, ya que, por un lado, el principal imputado de la causa, L.E.M., fue representado por los abogados particulares Ignacio Ferreyra y Jorge Chemes, mientras que los otros dos, E.O.B. y A.E.M., fueron defendidos, de manera particular, por el doctor Ramiro Carrasco. Cabe destacar que el comienzo de la audiencia fue en la Sala Nº 4 de Tribunales pero posteriormente se cambió a la Sala Nº 1 por una cuestión de espacio, ya que los familiares de uno de los imputados se hicieron presentes en el lugar.
El juez Carraro decidió dictar la prisión preventiva a L.E.M. debido a que consideró que las pruebas aportadas por el fiscal tienen cierta validez. Por tal motivo, deberá permanecer en la cárcel mientras dure el proceso judicial al ser imputado por el delito de “robo calificado por el empleo de arma de fuego, con la intervención de un menor de edad y tentativa de homicidio por atacar un personal policial en funciones”. No obstante, también se lo imputó por haber tenido una “resistencia a la autoridad” al momento de ser aprehendido por la policía.
El fiscal Urdiales explicó que todos los integrantes de la Policía Comunitaria que sufrieron el asalto el 7 de diciembre, reconocieron que fue L.E.M el principal integrante que ocasionó el robo. Además, lo sindicaron como el presunto autor de haber apuntado, con un arma de fuego, a una suboficial en su frente y haberle gatillado en dos oportunidades sin poder efectuar el disparo.
La investigación de la Fiscalía reveló también que el menor que participó del hecho –el cual fue derivado al Juzgado de Menores– habría sido el que comenzó a extraer los chalecos balísticos y los handys con frecuencia policial. En tanto, afuera del destacamento había dos sujetos más. Según los testimonios aportados, los sujetos se dieron a la fuga tras cometer el ilícito. En la imputación, Urdiales señaló –a través de dichos testimonios, tanto de los policías como de vecinos del Bº La Florida– que L.E.M. tenía puesta una camiseta color roja y negra (se presume que era del Club Colón de Santa Fe) al momento del robo. No obstante, argumentó que el imputado cuando fue aprehendido tenía en sus manos una camiseta del Club Banfield, situación que para el fiscal evidenció las claras intenciones que tenía L.E.M de pasar inadvertido.
Por otra parte, el funcionario del MPA aclaró que la aprehensión de los tres imputados fue en un pasillo ubicado en inmediaciones de las calles Mosconi y Corrientes. Allí se encontró el arma –arriba de un techo– que, según denunció una de la suboficiales, había sido con las que L.E.M. la había amenazado de muerte al momento del robo.
Los otros, en libertad
El juez dispuso la libertad tanto para E.O.B. y A.E.M. ya que consideró la “existencia de dudas en la forma de imputación” que realizó el fiscal Gustavo Urdiales. A su vez, aclaró que la investigación llevada a cabo por la Fiscalía no pudo “individualizar” los imputados con pruebas concretas. De todos modos, indicó que los implicados deberán presentarse de manera mensual ante las autoridades judiciales para sentar constancia y además estarán obligados a abstenerse de tener una relación con las víctimas o testigos involucrados en la causa.
Por Ignacio Mendoza / De la Redacción de Diario UNO Santa Fe
No hay comentarios:
Publicar un comentario