La organización cuestionó la reaparición mediática de Carlos Reutemann. En la causa Inundación, una de las últimas incidencias fue el planteo de prescripción presentado por el ex intendente Álvarez.
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La proximidad de las elecciones y la reaparición de Carlos Reutemann en la escena política renovaron las críticas de la Marcha de las Antorchas al ex gobernador de Santa Fe, jefe del Ejecutivo provincial cuando se produjo la inundación del 2003, la catástrofe hídrica que dejó 130 mil damnificados y más de 23 fallecidos, según los registro oficiales, pero más de 100 según relevamientos de la Casa de Derechos Humanos.
—Es que Reutemann está protegido.Lo ha estado siempre, desde la propia inundación, siempre se lo preservó, desde la Justicia sobre todo.
—¿Se puede revertir esta situación?
—Sí, desde la ciudadanía, con memoria.Queda a criterio de cada uno no olvidar lo que pasó. Yo creo que hoy Reutemann no puede caminar tranquilo por las calles de la ciudad sin que alguien, en algún momento, le grite inundador. Hoy está muy claro que él detentaba el poder, era quien tenía que cuidarnos. Pero eso es tan doloroso ver que en la Justicia su condición de inundador no ha avanzado, a tal punto que le dan la posibilidad de declarar por escrito, cuando tiene ganas, cuando la verdad es que él se borró y abandonó a la gente que tenía que proteger en una de las peores crisis que sufrimos los santafesinos en nuestra historia.
“Reapareció Reutemann. Se guarda (nadie sabe qué hace en el Senado).Y de pronto, cuando cree que puede acomodarse y obtener algún provecho personal, aparece. Para nosotros, que no olvidamos, la noticia es la misma: inundador impune, que no puede caminar por Santa Fe, y que busca grietas por donde reaparecer.Donde no se muestra es en la plaza 25 de Mayo: las cruces le siguen gritando: ¡culpable!”, expresaron ayer en un comunicado de prensa los integrantes de la Marcha de las Antorchas.
En diálogo con Diario UNO, Margarita Garau, una de las integrantes de la organización, amplió la idea del comunicado y consideró que pese al blindaje que tiene el ex gobernador como responsable de
la inundación del 2003, “los santafesinos no van a tolerar que vuelva a ocupar un cargo ejecutivo”.
la inundación del 2003, “los santafesinos no van a tolerar que vuelva a ocupar un cargo ejecutivo”.
“Estoy segura de que la mayoría de los santafesinos no lo dejaría ocupar nuevamente un cargo ejecutivo en la provincia. Si bien en un principio uno se encontraba con mucha gente que creyó esa versión de que a él no le avisaron que se venía el agua, las pruebas recolectadas en estos 10 años inhabilitaron ese discurso. Hoy nadie duda de que Reutemann sabía que se venía el agua del Salado y de que iba a ingresar por un obra inconclusa.
—Para otros funcionarios de aquella época no fue tan fácil evadir su rol de inundador. ¿Por qué cree que Reutemann logró recuperar su imagen tras la catástrofe hídrica?
—Es que Reutemann está protegido.Lo ha estado siempre, desde la propia inundación, siempre se lo preservó, desde la Justicia sobre todo.
—¿Se puede revertir esta situación?
—Sí, desde la ciudadanía, con memoria.Queda a criterio de cada uno no olvidar lo que pasó. Yo creo que hoy Reutemann no puede caminar tranquilo por las calles de la ciudad sin que alguien, en algún momento, le grite inundador. Hoy está muy claro que él detentaba el poder, era quien tenía que cuidarnos. Pero eso es tan doloroso ver que en la Justicia su condición de inundador no ha avanzado, a tal punto que le dan la posibilidad de declarar por escrito, cuando tiene ganas, cuando la verdad es que él se borró y abandonó a la gente que tenía que proteger en una de las peores crisis que sufrimos los santafesinos en nuestra historia.
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