Mariela Luparini, asesora legal de los propietarios de la firma, confirmó que los procesados "ya fueron a notificarse de esta medida, que demuestra que el juez nos está dando la razón". El 12 de este mes la policía fue a desalojar la fábrica por orden judicial, pero la medida se postergó.
La Capital |
El Juzgado Correccional Nº 8 de Rosario a cargo de José Luis Suárez procesó a 16 ex empleados de la cerámica Fighiera SRL que desde noviembre del año pasado mantienen tomada la planta ubicada en Arroyo Seco. Se espera que por estos días el magistrado disponga el desalojo definitivo del predio, tal como lo ordenó hace 15 días, aunque lo suspendió luego para evitar acudir a la fuerza pública con las más de 50 personas que se convocaron en el lugar a través de redes sociales para apoyar a los trabajadores.
Mariela Luparini, asesora legal de los propietarios de la firma, confirmó que los procesados "ya fueron a notificarse de esta medida, que demuestra que el juez nos está dando la razón; estas personas, en su momento, se dieron por despedidas y por tanto no tienen derecho a cometer un delito contra la propiedad ni a apropiarse de cosa ajena. Deberían haber recurrido a la vía legal correspondiente, en este caso, los juzgados laborales".
La profesional explicó que "el juez sigue manteniendo la medida de desalojo y ahora que estas personas están procesadas, es decir que hay indicios fundados del hecho, el juicio sigue hasta su sentencia. Si sólo hubiesen estado imputados, se les podrían haber levantado los cargos. El agravante hoy es que deberán asumir todo daño provocado a la empresa, que se debe evaluar. Pero en principio cuentan las deudas que se van acumulando y el lucro cesante".
En ese sentido, la abogada comentó que, según advirtieron los otros 17 empleados que continúan conformando la planta de personal y que ya están cobrando los montos acordados en una conciliación obligatoria celebrada en marzo último, uno de los problemas más graves que se presentarán una vez que los dueños retomen las riendas de la cerámica será el acondicionamiento de las chimeneas de unos hornos que deberían estar encendidos las 24 horas y que desde hace tiempo están apagados. "Hace ocho meses que están derrumbándose y el arreglo demandará unos 500 mil pesos estimativamente", acotó.
Amenazas. La empresa tenía un total de 32 empleados de los cuales 17 se dieron por despedidos cuando la firma dejó de pagarles sus salarios en noviembre del año pasado. Luparini comentó que uno de éstos declaró en contra de los compañeros que mantienen tomada la planta, argumentando que se había encolumnado con éstos bajo amenazas, y por ello no resultó procesado. De allí que la medida del juez Suárez alcanzó a 16 hombres y no a 17.
En tanto, la letrada comunicó que los otros 17 empleados de la cerámica que, representados por el síndico, participaron el 23 de marzo último de una conciliación obligatoria con la patronal, "continuarán conformando la planta de personal y ya cobraron el 11 de junio el dinero que se les debía, correspondiente a la segunda quincena de octubre del año pasado. El resto de lo que se les adeuda se pagará en 18 cuotas y corresponde a lo trabajado en noviembre, más otros conceptos como aguinaldo y vacaciones, pero ello se podrá deducir una vez que se pueda ingresar a la fábrica y acceder a los legajos", indicó Luparini, aunque aclaró que la firma "tendrá un plazo de gracia de 6 meses en los que deberá generar recursos".
Estos 17 empleados "en todo momento, y así quedó expresado en el acta labrada en el ministerio laboral, manifestaron que ellos querían recuperar sus puestos y una de las condiciones para volver a trabajar es que se vayan los ‘ex compañeros\' que se encuentran en el terreno de la empresa, porque los amenazaron para que se sumen a su ‘causa\'", dijo la abogada a La Capital.
Concurso preventivo. Sobre los motivos por los que la firma dejó de pagar a sus empleados, Luparini recordó que "en 2001 entró en concurso preventivo y terminó de sanear en 2011. En ese momento no había deudas, pero asumió entonces la gerencia una persona que fue removida en marzo y se investiga ahora si hubo una mala administración. Actualmente asumieron los propios dueños, que son 36 y que quieren reactivar la fábrica".
Por último, la profesional aclaró que la patronal "en ningún momento pensó en realizar ningún tipo de loteo o vender la fábrica, aunque hay que aclarar que una cerámica trabaja comprando y vendiendo los terrenos, dado que la tierra que se utiliza para fabricar el cerámico y los ladrillos es finita y no puede usarse toda la tierra de los campos sino sólo algunas capas. Una vez explotada esa porción de tierra, tiene que venderla y comprar nuevos lugares para explotar
No hay comentarios:
Publicar un comentario