El comisario José Luis Baella, quien hasta hace pocas semanas fue jefe de Delitos Complejos de la Unidad Regional XV de policía y está procesado por los delitos de encubrimiento agravado, incumplimiento de los deberes de funcionario público y partícipe necesario de coacciones, irá a juicio oral y público después de que su abogado defensor decidiera no apelara el fallo del juez federal Francisco Miño.
La Capital |
Baella empezó a ser investigado en marzo pasado cuando agentes de Asuntos Internos de la policía provincial lo sorprendieron llegando en un vehículo oficial de la ex Drogas Peligrosas, donde prestaba servicios como jefe de patrullas, hasta una casa de la localidad de Colastiné Norte que estaba siendo observada porque allí residía Daniel El tuerto Mendoza, un reconocido narco santafesino. Según comprobaron los investigadores, el policía había retirado el auto minutos antes del estacionamiento de Jefatura y el hombre acusado de comercializar estupefacientes estuvo con él, a bordo del vehículo, unos 15 minutos. Después bajó y reingresó a la propiedad bajo investigación.
Nada se sabe sobre lo que pasó en ese encuentro. Pero esa misma casa fue allanada el 14 de julio, cuando ya Baella no trabajaba más en la ex Drogas Peligrosas y había sido trasladado a Coronda, y en el lugar se descubrió una cocina de cocaína en la cual se secuestraron unos 13,6 kilogramos de cocaína y distintos precursores químicos para la elaboración de la droga.
Por ese hecho el fiscal federal Walter Rodríguez indagó a Baella por el delito de encubrimiento agravado y ahora esa acusación quedó firme, por lo que el comisario deberá responder en el juicio oral y público cuya fecha aún no se ha establecido.
La otra imputación sobre Baella es la de coacción en perjuicio de Norma Castaño, la mujer que integra la ONG Madres Solidarias y que durante los últimos años denunció la presunta connivencia entre policías de altos rangos y narcotraficantes.
Esa acusación tiene base en un hecho ocurrido en marzo de 2011. Entonces, según quedó acreditado en un video hogareño que circuló por YouTube bajo el título "madre del dolor tranza con narco", Norma Castaño recibió en su casa a El tuerto Mendoza en una operación que para el fiscal "fue armada por el propio Baella para desacreditar a la mujer y exigirle que retire las denuncias de connivencia que venía realizando".
En ese sentido, el juez Miño dijo en el auto de procesamiento que "se encuentra corroborado en la causa que el comisario Baella habría permitido que la filmación sea utilizada por la persona que había sido investigada por él mismo, durante marzo de 2011, es decir Daniel Francisco Mendoza".
Y agregó el magistrado: "Esa filmación en la que se observa a Mendoza en una conversación en la puerta de la casa de Norma Castaño habría sido ordenada por el mismo Baella en una suerte de seguimiento iniciado en el centro de Santa Fe" y realizada por un efectivo que reside frente a la casa de la mujer y registró todo desde el mimso momento en que Mendoza baja de su propio vehículo.
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