Por los embotellamientos en el Puente Carretero, los santotomesinos demoran el doble en recorrer cada kilómetro que los separa del centro, en comparación con la gente que vive en la Costa o en los countries. En el norte, el tránsito también se complica en Blas Parera y Aristóbulo del Valle.
Un embudo. A la ida y a la vuelta del
trabajo, el tráfico se traba en el ya obsoleto Puente Carretero. El
relevamiento de El Litoral confirmó que éste es uno de los problemas más
críticos en el flujo de tránsito del área metropolitana.-
Si usted vive “a pocos minutos” de Santa Fe y debe trasladarse bien temprano, se levanta, desayuna y se alista para ir al trabajo, a cursar o a hacer un trámite. ¿Pero se imagina el tiempo que lleva ingresar al corazón de la ciudad? ¿Sabe qué distancias recorre por día?
Llegar al centro en una jornada hábil, en el horario pico de las 7.30, desde alguno de los cinco accesos viales a la capital santafesina tiene sus diferencias: Santo Tomé o las avenidas del norte representan las mayores demoras y complicaciones para los conductores, con un tiempo reloj de entre 2 y 3 minutos por cada kilómetro (ver infografía).
El Litoral relevó los cinco puntos de ingreso en ese complejo horario, tomando como referencia de llegada la Municipalidad de Santa Fe.
Quienes provienen del norte y deben ingresar por las rutas 11 ó 4 (Recreo y avenida Blas Parera, Monte Vera y avenida Aristóbulo del Valle, las vías que generalmente toman quienes llegan de otras ciudades hasta dar con bulevar Pellegrini) deben enfrentar algunos tramos complicados en Blas Parera y Aristóbulo del Valle, que generan demoras que alargan los tiempos de recorrido. Por eso, algunos vecinos de la zona norte también optan por Peñaloza o Facundo Zuviría.
Y en el caso de Santo Tomé (ver nota aparte) sucede algo similar, con el agregado de que las velocidades son menores y la transitabilidad es aún más cortada -en promedio lleva más del doble de tiempo circular por este acceso que ingresar desde la Costa-. La causa central son las demoras que se generan en el ya obsoleto Puente Carretero.
En la entrada por la Autopista Santa Fe-Rosario, los reclamos de los vecinos de los countries se vinculan con episodios de inseguridad, porque tanto allí como en el ingreso desde la zona costera (Rincón, Colastiné y quienes vienen de Paraná) la circulación es más fluida durante la semana.
Rápidos y peligrosos
Desde el control policial (el martes no había ningún tipo de movimiento) ubicado en el cruce de las rutas 11 y 70 hacia el sur, lo más destacado era la diferencia numérica de vehículos que ingresaban a Santa Fe con relación a los que egresaban. Casi en el límite de Recreo y Santa Fe, los problemas en el tránsito comenzaron a ser más significativos. En cercanías de la Escuela Nº 27 José Gálvez, la circulación era lenta y de cuidado, porque entraban y salían muchos chicos a ese establecimiento. Además, cientos de motos y bicicletas gobernaban la zona.
El pavimento de Blas Parera está demacrado, verdaderamente deteriorado en todo este tirón. Las desatenciones en el sistema de tránsito alcanzan, en muchas ocasiones, a los peatones que no respetan los lugares de cruce, lo cual produce que algunos vehículos deban frenar peligrosamente para no chocarlos a mitad de la avenida.
Un idéntico panorama se advierte desde Monte Vera, en cuanto a la gran diferencia de quienes van hacia el norte (casi imposible hacer un sobrepaso que no sea riesgoso) con quienes circulan hacia el sur. La circulación es más espaciada desde el cruce de las rutas 4 y 6 hasta el ingreso norte a Aristóbulo del Valle, aunque en ese tramo comienza a manifestarse una mayor presencia de colectivos (sobre todo interurbanos).
Los sobrepasos se realizan por izquierda y derecha, indistintamente, dependiendo de la velocidad que lleve el que va delante. Los motociclistas menos precavidos aprovechan los intersticios para zigzaguear peligrosamente entre los vehículos. Las mayores complicaciones se presentan desde Aristóbulo y Gorriti hacia bulevar.
Oeste y este
En general, la zona de los countries tiene un movimiento más equilibrado del tránsito que el resto de los accesos, porque muchos vehículos circulan rumbo al interior de la ciudad y otros tantos salen por la autopista con dirección al oeste (Parque Industrial, Sauce Viejo, Aeropuerto, Coronda, Rosario, entre otros).
Para dirigirse hasta el microcentro, la dinámica de la circulación es mayor que por las avenidas del norte. Además aparece la opción de la Circunvalación Oeste que, en un horario así (no tanto de noche por la inseguridad), resulta muy útil para quienes se dirigen a la zona centro-sur de la ciudad, ya que se puede hacer todo el recorrido y salir en 1º de Mayo detrás de la avenida Juan José Paso (Parque del Sur). Respecto de las motos, a esa hora por la autopista circulan pocas y todas con casco (al menos durante la recorrida bajo la conducción al volante de Mario Hereñú).
Desde la Ruta Provincial Nº 1 (a la altura del kilómetro 2,5) hasta el centro de Santa Fe, los tiempos son aún menores. Inclusive, el tránsito es más continuado para quienes no tienen que bajar a bulevar Gálvez tras pasar por el Puente Oroño y pueden seguir por avenida Alem.
Se advirtieron sobrepasos peligrosos, a velocidades superiores a los 100 km/h, pero sólo en algunos tramos. A la altura de la Ciudad Universitaria empiezan los “cortes”, en los cuales se agrupan los vehículos y cuesta un poco avanzar. La misma situación se produce en Alem y Belgrano, pero es un acceso rápido al microcentro. Lógicamente, el panorama es totalmente diferente en la Ruta 1 durante los fines de semana, cuando los embotellamientos y el caos vehicular manda.
El acceso desde Santo Tomé
El tránsito fluye cada vez más lento
Para realizar el trayecto que va desde la conjunción de avenida Luján y avenida 7 de Marzo (Cinco Esquinas), a las 7.30, hasta la Municipalidad de Santa Fe se demora más del doble que desde los otros accesos a Santa Fe. Además, si un santotomesino sale 15 minutos más tarde (alrededor de las 7.45) deberá armarse de paciencia para enfrentar el tristemente célebre embotellamiento del estribo oeste del Puente Carretero (el paso se hace tan lento, que muchos aprovechan y se toman unos mates).
A las 7.30, los 6 kilómetros existentes entre el punto de partida y de llegada se recorrieron en 20 minutos, después de atravesar un trazado de unas diez cuadras por avenida 7 de Marzo (trayecto que se hizo con cierta lentitud, ya que insumió 7 minutos), el cruce completo del histórico enlace vial hasta el estadio del Club Atlético Colón (a las 7.39 se pasó por el terraplén Irigoyen, lo que demuestra que a partir del segundo arco el tránsito se aligera), avenida Juan José Paso hasta 4 de Enero y luego hasta la intersección con Salta.
Antes de llegar al estribo del puente, se pudo observar cómo empezaba a volverse muy lento el acceso por Candioti (con unas tres cuadras de cola), hecho que obedecería a que los inspectores municipales ya no dejan acceder al Carretero por bulevar Mitre y deriva por 9 de Julio hasta Candioti a quienes vienen por esa arteria.
En cuanto al comportamiento de las motos, se apreció un alto número de motociclistas con cascos (7 de 7 al principio del puente; 22 de 25 hasta el segundo arco), pero también que muchos de ellos hacen caso omiso a la prohibición del sobrepaso, utilizando la derecha como un verdadero corredor vial.
María José Rabellino, de Santo Tomé
Contratiempos
Soy una santotomesima que sufro a diario el tráfico en el Puente Carretero. Es realmente estresante y preocupante, en muchas ocasiones llegamos tarde a compromisos y perdemos el presentismo laboral porque, incluso saliendo con tiempo, nos debemos al “azar” para cruzar antes o después el Salado. Son pocas las voces que se escuchan de vez en cuando sobre un nuevo puente. ¿Es necesario que la vuelta a casa sea una tortura?
Luis Urch / Ruta colapsada
Desde mayo de 1969 a la fecha, les puedo contar las más insólitas historias de la ruta de la Costa, ya que tengo mi radicación legal en ese pueblito y allí paso los fines de semanas, feriados, vacaciones anuales, cumpleaños, etc. Esta zona, socialmente, en estas últimas décadas creció a valores exponenciales y prácticamente todo sigue igual en cuanto a infraestructura. Aunque el actual gobernador haya dicho lo contrario cuando era ministro, la Ruta 1 está colapsada y las obras viales e hidráulicas por ahora no empiezan.
Carlos Valinotti / Prioridad
Me es grato hacerles saber la satisfacción que me ha causado el artículo referente al tránsito en Santa Fe. En primer lugar, es imposible a toda hora el tránsito por el puente de Santo Tomé, por lo tanto creo que sería prioridad hacer en forma urgente otro puente y no como están licitando la Ruta 1, esta arteria solamente se encuentra congestionada los feriados, que es cuando el tránsito vehicular es más intenso debido a la cantidad de turistas que circulan por allí, y durante la semana el tránsito es normal. Puedo asegurarlo ya que viajo en forma seguida por el lugar.
Marcos Gomila / Intransitable
Venir de Santo Tomé por el Carretero toma casi una hora en horarios pico. Siempre y cuando no se corte el puente por cualquier motivo. El puente tiene más de 70 años y ya está totalmente colapsado.
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