anuncio

anuncio

anuncio

anuncio

viernes, 3 de febrero de 2012

Rosario se pronunció contra la privatización de islas entrerrianas

El 2 de febrero de 1971 se firmó en la ciudad iraní de Ramsar la Convención Internacional sobre los Humedales y por esta razón cada año organismos oficiales, organizaciones de la sociedad civil y ciudadanos interesados realizan actividades para sensibilizar a la comunidad sobre la importancia de preservar estos espacios naturales.

El 2 de febrero de 1971 se firmó en la ciudad iraní de Ramsar la Convención Internacional sobre los Humedales y por esta razón cada año organismos oficiales, organizaciones de la sociedad civil y ciudadanos interesados realizan actividades para sensibilizar a la comunidad sobre la importancia de preservar estos espacios naturales. En Rosario la conmemoración no tuvo más que expresiones de rechazo hacia la ley recientemente sancionada por Entre Ríos para la privatización de sus islas fiscales y la derogación de otra que preservaba estas tierras de la siembra y la fumigación.
Gracias a la convocatoria de la página de Facebook "¡El Paraná no se toca!", más de 500 personas entre vecinos autoconvocados, centros de estudiantes, entidades ecologistas y movimientos políticos, entre otras organizaciones, se congregaron ayer a partir de las 19 frente al Monumento a la Bandera para protestar pacíficamente contra la iniciativa entrerriana y también en adhesión a la marcha nacional contra la megaminería en Famatina. Un trozo de arco iris que apareció a lo lejos, sobre el humedal y hacia el nordeste, acompañó también a los manifestantes, en su mayoría jóvenes, que se presentaron con pancartas. Promediando las 20, algunos tambores y una batucada se sumaron a la cada vez más numerosa concurrencia, que se engrosaba con deportistas y peatones que ocasionalmente pasaban por el lugar.
Defensa. Algunos estaban muy empapados en el tema, otros no tanto, pero averiguaban entre la muchedumbre "cómo es esto de que quieren sembrar arroz en las islas" y no dudaban en firmar las planillas que circularon y que se anexarán a una nota que será enviada al defensor del pueblo, Anselmo Sella. La misiva advierte entre otros puntos que la ley sancionada en Entre Ríos "viola el principio precautorio de la ley General Ambiental y el artículo 41º de la Constitución Nacional, como también los acuerdos interprovinciales del Piecas DP (Programa Integral Estratégico para la Conservacion y Aprovechamiento Sostenible en el Delta del Paraná) y las normativas locales que declara a esta zona como reserva natural de usos múltiples".
Entre los manifestantes estaba el fotógrafo de la naturaleza "Guarú", responsable del blog www.rioparana.wordpress.com, quien expresó su preocupación por el destino del humedal. "Es necesario contar lo que está pasando, abrir cabezas", remarcó. Junto a él había un grupo de kayakistas y usuarios del río, amantes de las islas, quienes expresaron que al conocer la noticia de la sanción de la polémica norma "nos declaramos en alerta". Y adelantaron que no descartan incorporar algún tipo de protesta en el próximo raíd Rosario-Victoria, programado para el 11 y 12 de febrero.
"Pocos conocen la riqueza del Delta y que en nombre del progreso se puede hacer un desastre. No hacemos un cuestionamiento político o económico, ni nada que se le parezca. Nos motiva el amor que sentimos por nuestro río, sus características y las satisfacciones que nos da a quienes lo recorremos y lo valoramos", expresó José Gabriel "Pepe" Suárez, quien se define como un kayakista explorador.
Difusión. La sanción sobre tablas y sin discusión de la ley 10.092 por parte de la Legislatura entrerriana no tuvo en principio demasiada difusión. Fue sin duda el ecologista Jorge Daneri, miembro de la Fundación Mbiguá de Paraná, quien dio la voz de alerta sobre los alcances y los riesgos que la norma representa para uno de los pocos humedales del planeta.
Las notas de opinión del ecologista hicieron dimensionar la gravedad o el impacto de una ley que establece transformar para volver productivas unas 200 mil hectáreas de tierras inundables vírgenes, un pulmón verde único por su biodiversidad, un patrimonio ambiental invaluable que de acuerdo a la norma pasará a manos de una sociedad anónima sugestivamente denominada "Arroceros del Delta".
Lo alarmante, más allá de una serie de declaratorias y ordenanzas que en teoría quedarían sin efecto ya que la 10.092 declara que será vetada "toda otra norma que se oponga a los fines" de la iniciativa, es la derogación de la ley Nº 9.603. En su articulado, ésta contemplaba la protección de las islas fiscales a través de la prohibición de la siembra y la fumigación.

No hay comentarios:

Publicar un comentario