Camioneros se alista para combatir al Gobierno y ganarle la calle

En el sindicato aseguran que el jefe de la CGT retomará el perfil que lo caracterizó durante la lucha contra Menem. Cristina como "blanco".

Hugo Moyano, junto a sus hijos Facundo Moyano y Pablo Moyano.

El Sindicato de Camioneros se prepara para un año combativo. Su secretario general, Hugo Moyano, ya comenzó a dar señales de un viejo perfil que promete ponerlo en el centro de la escena opositora contra el Gobierno.
En Camioneros ya se habla del regreso “del Moyano de los 90”: protesta, marchas, paros, discursos opositores y enfrentamiento permanente con el Gobierno. Es el reclamo que su hijo Pablo venía realizándole a su padre desde hace meses.
Mañana, el consejo directivo del gremio se reunirá para analizar las medidas de fuerza en torno al conflicto por el despido de trabajadores de la empresa Correos del Sur en Chubut. Entre las opciones de protesta, se espera un paro, marchas a Plaza de Mayo, al Ministerio de Trabajo y a la embajada de Italia, debido a que el gremio centró sus protestas en la empresa de ese país Camuzzi, que rescindió un contrato a Correos del Sur y desencadenó los despidos.
El viernes, la cartera de Trabajo, al mando de Carlos Tomada, advirtió al gremio que debía “garantizar la paz social” o sería sancionado, ya que el Gobierno dictó conciliación obligatoria por el conflicto.
Pablo Moyano, secretario adjunto de Camioneros, dejó a los funcionarios con la palabra en la boca y abandonó la reunión. Más tarde, en Puerto General San Martín, y luego de más de un mes de silencio, el jefe de la CGT redobló la apuesta y dijo ante sus dirigentes: “No vamos a tolerar arrebatos políticos que dejen trabajadores en la calle”.
“La lucha va a ser por uno, por diez o por cien”, advirtió Moyano en la provincia de Santa Fe, según contaron dirigentes camioneros a PERFIL.
 En el Gobierno, ayer se retractaron y dijeron que el sindicato puede marchar mientras no afecte a las empresas en conflicto.
Señales. En el acto que protagonizó el viernes, Moyano se despachó contra el Gobierno y dijo a los afiliados camioneros y de otros gremios de la central obrera que “se vienen tiempos difíciles”. Arremetió duro contra los ministros del Gabinete: “No me interesa lo que dicen algunos funcionarios. Son los ‘che pibe’. Los funcionarios no pueden hacer ni una mueca de truco si no se lo autorizan, son chirolitas. A mí me interesa lo que digan los trabajadores”.
“No vamos a ceder ni un milímetro en lo que hemos conquistado, y eso implica salario y condiciones de trabajo”, agregó Moyano.
Los camioneros se preparan para un año difícil y suman viejos aliados de la lucha contra el menemismo, como la Central de Trabajadores de la Argentina (CTA) y las organizaciones territoriales, que en los 90 fue la Corriente Clasista y Combativa (CCC) del Perro Santillán y este año será Barrios de Pie.
El líder de la CTA disidente, Pablo Micheli, confirmó ayer que conversa con dirigentes de la CGT y organizaciones sociales para una movilización conjunta en marzo para repudiar “el ajuste que aplica el Gobierno” y en contra del 18 por ciento de aumento salarial que se quiere “imponer como techo”. La misma advertencia hizo Moyano, cuando dijo que las paritarias se regirán por el “Indec del supermercado”.
“Moyano espera conflicto social en marzo y abril, cree que aumentará el malhumor de la gente porque le suben las tarifas del transporte público, del gas, de la luz. Al mismo tiempo, se dará la mayoría de las negociaciones paritarias. El conflicto está en puerta”, analizan muy cerca de Moyano.
La cúpula camionera pidió informes sobre la situación del campo luego de la sequía. Según los números que maneja Moyano, de 29 millones de toneladas de maíz que se transportaron en 2011, los camioneros sólo moverán este año unos 15 millones de toneladas de maíz. Además, le informaron que la cosecha de soja, la principal carga de granos del país, bajará un 35 por ciento. “Se espera que esto perjudique a los camioneros, a las fuentes de trabajo y los aumentos salariales. Pero Camioneros no va a permitir despidos, las empresas deberán reducir su margen de rentabilidad”, confiaron a PERFIL en el gremio.