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sábado, 3 de septiembre de 2011

El rol de los adultos cuando los chicos están en las redes sociales

Una de las dificultades para los padres es la barrera que implica el desconocimiento sobre el uso de las tecnologías que manejan sus hijos. Los consejos para evitar el acoso en internet.

El rol de los adultos cuando los chicos están en las redes sociales

En la actualidad gran parte de las relaciones sociales de los chicos se nutren y se extienden a través de internet y, particularmente, por medio de las redes sociales como Facebook. Ese escenario plantea algunos interrogantes a los padres que muchas veces se sienten en inferioridad de condiciones frente a las nuevas tecnologías. Por un lado, se plantea el interrogante de cómo acercarse al mundo virtual para empezar a entender algunos códigos que sus hijos manejan a la perfección. Por otro lado, esa cercanía que se debe lograr no debe implicar una invasión del espacio de intimidad del chico (ver página 11) y es más fácil de desarrollar si en otros ámbitos la relación con los niños o adolescentes es fluida y de confianza. Una relación que presenta algunos límites en la comunicación no se va a solucionar con las tecnologías. A esas dificultades, ahora, se le suman las trabas tecnológicas. Jéssica Quirco y Nuria Alonso –del programa Internet Segura de la ONG Chicos.Net– señalaron que es importante el incremento del ciberacoso y resaltaron que la clave no es vigilar a los chicos sino enseñarles a cuidarse. “Hay que ser conscientes de no demonizar la tecnología; al contrario, tiene un montón de aspectos positivos. Por eso nos apoyamos en la autoprotección, que es algo que involucra a todos. Partimos del cuidado de que las reglas las cuidamos entre todos. Que alguien no sepa de tecnología no quiere decir que no se puede aprender, acompañar y poner límites o marcos de referencia”, explicó Nuria Alonso. Por su parte, Quirco agregó: “En general los chicos dicen que toman medidas de precaución pero cuando empezás a preguntarles qué hacen, ves que en realidad no”. Acerca de cuáles son los principales miedos que enfrentan los adultos, Quirco dijo: “Lo que sucede, por esa diferencia generacional, es que optan por alejarse. Entonces el adolescente queda solo frente a esto. El rol parental sigue existiendo más allá de cuál sea el objeto sobre el que hay que poner límites, acompañar o ser adulto”. En tanto, Alonso marcó: “El miedo es justamente a no saber. En general estamos acostumbrados a que los adultos sabemos y enseñamos y en este caso pasa al revés. Además, está el miedo que se le tiene en general a la tecnología y cómo el adulto se para frente a la computadora”. Al ser consultada acerca de los riesgos que corren los chicos y adolescentes frente a las pantallas, Quirco explicó: “Puntualmente vemos el tema del ciberbullying, que tiene que ver con el abuso entre pares a través de las nuevas tecnologías, no sólo en internet. Después está el grooming o preparación en línea que tiene que ver con el abuso, o su preparación, de un adulto sobre un menor a través de distintas estrategias. Hay que tener en cuenta que el estar preparando en línea una situación de abuso ya es un abuso, hay una diferencia de poderes planteada. “También –añadió Alonso– hay que hablar de la circulación de material pornográfico, sea con imágenes o sonidos. El uso excesivo de la tecnología termina perdiendo el uso positivo de las herramientas. Otro de los riesgos que encontramos y está bastante de moda es el sexting, la reproducción de imágenes de parte del cuerpo que se exponen para la aprobación de los demás. “Hay que tomar conciencia de que una vez que colgás algo en internet perdés el rastro de por dónde circula y dónde puede terminar. En cierta medida perdiste el control, por más que después lo saques. Por más que vos pienses que es sólo una foto en la playa con una amiga, pero después puede ser usada para fines inimaginables. Ése es uno de los grandes riesgos al que los adolescentes no le prestan tanta atención”, agregó Alonso. Al respecto destacaron la necesidad de volver a diferenciar lo público, lo privado y lo íntimo. Y comentaron que es importante formar al niño y al adolescente para que pueda tomar sus propias decisiones con la información y los cuidados aprendidos en su familia.

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