En un comunicado de prensa, el secretario de Transporte de la Nación, Juan Pablo Schiavi, negó que se hayan cortado los subsidios al gasoil para el autotransporte del interior del país y aseguró que los inconvenientes en el abastecimiento se debieron a un cambio de metodología del proveedor. De esa manera, quitó dramatismo a la preocupación que se había instalado entre autoridades del gobierno provincial y algunos empresarios del sector.
El funcionario del Gobierno Nacional explicó que “lo que se hizo fue implementar un sistema de compensación complementaria provincial, que subsane los costos que se corresponden con la diferencia entre el costo del gasoil a precio diferencial y el de mercado”. Por lo que informó Schiavi, la medida se implementó “debido a los inconvenientes en la logística de abastecimiento de gasoil subsidiado por parte del principal proveedor de combustible”. De esta forma, Schiavi le respondió al secretario de Servicios Públicos de Santa Fe, Alejandro Boggiano, quien había afirmado que la Nación decidió cortar el subsidio al gasoil del transporte del interior del país. Asimismo, se señaló que “la nueva metodología implementada surgió a través de la firma de un acta acuerdo entre la Secretaría de Transporte de la Nación, la Comisión Nacional de Regulación del Transporte (CNRT) y la Federación Argentina de Transportadores por Automotor de Pasajeros (Fatap)”. Al respecto, con cálculos aportados por la Fatap, se indicó que para todo el interior del país se compensarán 31,4 millones de litros de gasoil, con un costo estimado mensual de 78 millones de pesos. Esos fondos se girarán como parte de las Compensaciones Complementarias Provinciales, uno de los tantos rubros que integran el Sistau, que es el subsidio al transporte automotor de pasajeros. Hasta el último día de junio, las empresas de transporte público locales, de media y larga distancia pagaban la parte mayoritaria del combustible que consumen a 90 centavos más IVA, contra los 4,30 pesos que el gasoil cuesta en los surtidores. En tanto, desde el 1 de julio deberán comprar por su cuenta y cargo a las petroleras, para lo cual recibirán en los primeros días de cada mes el equivalente a 2,47 pesos por litro de gasoil, la diferencia con los 4,30 pesos del valor de mercado se completan con 60 centavos por litro de crédito fiscal, y con aportes de las propias empresas. Está claro que la decisión generó preocupación en el sector empresario, ya que la Nación no se caracteriza por cumplir en tiempo y forma con los cupos de combustible, y encima ahora prometió hacerlo pero con recursos económicos. Frente a esa incredulidad de los privados, desde el Gobierno se comprometieron a enviar la partida correspondiente al gasoil del 1 al 7 de cada mes. ¿Quejas infundadas? El secretario de Servicios Públicos de Santa Fe, Alejandro Boggiano, se había quejado en las últimas horas porque el Gobierno Nacional decidió cortar los subsidios al gasoil para el transporte del interior del país, aunque para el gobierno de Cristina Fernández eso no es así, ya que la ayuda seguirá llegando a las provincias pero mediante otra metodología. “De acuerdo a lo que me comunicó la Nación, el jefe de Gabinete (Aníbal Fernández) no pudo cerrar la negociación semestral con las petroleras, sobre el gasoil subsidiado, por diferencias de números vinculados a cuestiones impositivas y compensaciones de importaciones-exportación de combustibles. Por este motivo, las petroleras tomaron la decisión unilateral de no entregar más combustible subsidiado. Lo extraño es que sí se le entrega a Capital Federal”, fue lo que había informado Boggiano, y luego refutó el secretario de Transporte de la Nación, Juan Pablo Schiavi.
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