Ocurrió este viernes en la vivienda de un empresario rafaelino y en otra vivienda lindera. Los delincuentes se manejaron con profesionalismo. Mantuvieron cautivas por tres horas a sus víctimas hasta hacerse del botín.
El Litoral |
La información a la que se pudo tener acceso, debido a que los propietarios prefirieron que el caso quede en estricta reserva, indica que, sobre la media mañana de este viernes, los ladrones, vestidos con ropa de una firma del servicio de comunicaciones, llegaron a una de las casas, dispuestas de manera contigua, sobre la calle Fleming, en el moderno y exclusivo barrio Pizzurno, sorprendieron a una empleada y bajo amenazas con armas de fuego, la obligaron a franquearles la entrada.
Ya en el interior, los malvivientes la ataron y amordazaron para luego comenzar con la faena delictiva no si antes neutralizar también a la dueña de casa y uno de los hijos.
Con todo bajo control, se dedicaron a recorrer y hurgar en todas las habitaciones en busca de dinero y cualquier otro elemento que aporte al botín.
Todo marchaba sin contratiempos, hasta la llegada del jefe de familia, quien rápidamente se dio cuenta de la situación y no opuso resistencia alguna siendo también reducido por los temerosos “visitantes”.
Cabe destacar, siempre según trascendidos, que los asaltantes actuaron, en todo momento, a cara descubierta y se movieron con absoluto profesionalismo y firmeza para consumar el atraco sin ejercer ningún tipo de violencia física ni psicológica, por el contrario, se sostiene que tuvieron un trato amable con sus víctimas
Cuando concluyó la requisa, que les habría reportado cerca de 20 mil pesos en efectivo, celulares, notebooks, cámaras fotográfica y de video y alhajas, los ladrones se movilizaron por los fondos, hasta la vivienda contigua, en la que se toparon con el matrimonio y el hijo que la habita, quienes corrieron la misma suerte que la otra familia, aunque no se brindaron detalles de lo que se habrían llevado.
Recién pasadas las 13, uno de los integrantes del primer grupo familiar asaltado pudo librarse de las ataduras y liberar al resto poniendo fin a varias horas de tensión.
El hecho fue puesto en conocimiento de Policía y rápidamente se puso en marcha una investigación para dar con los malvivientes quienes, se presume, no serían de la ciudad y habría llevado adelante una tarea de inteligencia previa o actuaron en función de la información aportada por algún “datero” local.
No hay comentarios:
Publicar un comentario