El intendente de Venado Tuerto dijo que no tiene previsto dejar su cargo como conductor del Justicialismo. Sin embargo, persisten las versiones sobre una supuesta dimisión después del congreso partidario previsto para el próximo 22 de mayo.
El actual presidente del Partido Justicialista, José Luis Freyre, debió salir hoy nuevamente a desmentir su renuncia al cargo. “No voy a renunciar”, dijo taxativo esta mañana ante la consulta de El Litoral. “Sé que por las redes sociales están hablando de una supuesta reunión donde se habría discutido este tema, pero yo lo desmiento”, sostuvo el actual intendente de Venado Tuerto.
Las versiones daban cuenta de que la supuesta dimisión sería anunciada en la próxima reunión del Congreso partidario, previsto para el 22 de mayo. Pero Freyre lo negó. “En ese congreso abordaremos temas inherentes a las próximas elecciones legislativas”, sostuvo. El dirigente kirchnerista no quiso especular sobre los orígenes e intenciones de los rumores vinculados con su supuesta renuncia.
“No sé a qué atribuirlo”, se despachó. Sin embargo, cuando este diario lo indagó respecto de si en algún momento lo había pensado, habló del tiempo y las responsabilidades que le implica su función como autoridad municipal. Un argumento similar había utilizado en marzo pasado, cuando en pleno conflicto por cuestiones salariales, el personal del partido le reclamaba que pasara más tiempo en la institución. En esa ocasión, Freyre dijo a este diario: “Además de ser presidente del PJ, soy intendente”.
Versiones igual
Como se dijo, no es la primera vez que se habla del posible alejamiento de Freyre de la cúpula del partido. Y a pesar de la nueva desmentida, otras fuentes partidarias y legislativas consultadas hoy por este diario insistieron en que la renuncia del dirigente sería cuestión de tiempo. ¿Las causas? Un mix entre la pretensión de no desatender su gestión municipal en la intendencia venadense, y la desazón como conductor y líder por haber fracaso en la construcción de consensos a la hora de -por ejemplo- acordar estrategias legislativas.
De hecho, la fragmentación en el PJ que había quedado evidenciada el año pasado cuando se trató la reforma tributaria, operó como un disparador de las versiones que también en aquella ocasión se generaron sobre su posible renuncia. En aquel momento, Freyre aseguraba que daría pelea y que no aflojaría “ni debajo del agua”. Pero sí planteaba que “para que el esfuerzo de todos tuviese sentido”, tenía que existir “una agenda política propositiva y compartida; una construcción colectiva, pero sobre todo, para plantear una agenda política común”.
Las fuentes consultadas coincidieron en señalar que la eventual renuncia, en un año atravesado por los comicios legislativos, sería estrictamente por una decisión personal. “Nadie le pide que se vaya”, aseguraron. Esta mañana, Freyre redobló la apuesta. “Todavía tengo dos años de mandato”, sentenció.
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