La divisa llegó a venderse debajo de $8,90. Al cierre, perdió 10 centavos respecto del miércoles. En la City, el dólar oficial cotizó estable a $5,24. El "contado con liqui", a $8,88
Crédito foto: Adrián Escandar
El dólar libre se negoció al cierre con una baja de 10 centavos, a 8,95 pesos, en una operatoria volátil y de escaso volumen. Así se alejó de los valores que alcanzó la semana pasada, cuando superó los $10 y alcanzó una brecha cambiaria del 100 por ciento. Desde el miércoles 8 de mayo, el dólar libre perdió $1,5 ó 14,4 por ciento.
Por su parte, el dólar oficial cotiza estable a $5,24 en bancos y casas de cambio de la City porteña; la brecha cambiaria es del 70,1 por ciento. De este modo, en los últimos 30 días el Banco Central ajustó el tipo de cambio 1,748%, acumulando un salto de 17,5% en los últimos 12 meses y proyectando a ese ritmo una suba de 23,1% a un año vista.
La expectativa sobre la eventual puesta en marcha del proyecto de blanqueo de capitales produjo un efecto de contagio y provocó la volatilidad del dólar, ante la previsión de un mayor flujo de divisas en el ámbito nacional.
"Cuando estaba Martín Redrado en el Banco Central, uno lo veía manejando los distintos hilos del mercado cambiario y jugando con las tasas de interés, los mercados a futuro. Todo eso, hubo un período de tiempo en que Mercedes Marcó del Pont, por supuesto, no adhería a esas herramientas. Y ahora descubrimos que nuevamente el Banco Central, con el apoyo de la AFIP, también algunas mesas de algunos brokers que también ayudan a descomprimir lo que es el mercado del blue, todos juntos en este momento, con estos fuertes rumores sobre inspecciones en las casas de cambio o sociedades de Bolsa, están llevando a que la psicología también empiece a tener un lugar destacado en esta mecánica", graficó el periodista especializado Julián Guarino, por FM Cultura.
Por su parte, los negocios en la plaza interbancaria oficial permanecían estables a 5,2325/5,235 pesos por dólar.
El volumen operado ascendió a 297,22 millones de dólares en el mercado de contado (spot) y 96,80 millones en el de futuros, en una jornada con mayor liquidación de divisas desde el sector exportador.
"Argentina es una economía bi-monetaria. Desde el año 1981, las normas del Banco Central permiten y disponen los depósitos en moneda extranjera. Hoy hay un contexto de represión de eso, donde se quiere forzar una pesificación y ahí es donde está el primer chisporroteo con acciones de este gobierno: en enero de 2007 seintervino el INDEC", opinó el ex secretario de Finanzas Guillermo Nielsen. "Acá hay que darle mayor racionalidad posible a la macro (economía), que hoy no latiene", añadió.
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