Justo a mitad de campeonato, Newells hará un click. Nueve fechas con Javier Torrente, la pausa de hoy con Sergio Giovagnoli y nueve fechas por venir con Diego Cagna, si no surgen imponderables. Pero claro, esto es fútbol, los tres puntos valen igual y muchos más los de esta tarde en el sur bonaerense ante Banfield, desde las 17.10, con arbitraje de Jorge Baliño.
Justo a mitad de campeonato, Newell's hará un click. Nueve fechas con Javier Torrente, la pausa de hoy con Sergio Giovagnoli y nueve fechas por venir con Diego Cagna, si no surgen imponderables. Pero claro, esto es fútbol, los tres puntos valen igual y muchos más los de esta tarde en el sur bonaerense ante Banfield, un rival con problemas deportivos similares y que, como los rojinegros, deben prever hoy una buena cosecha para no sufrir en un futuro cercano. Por eso, aunque siempre cada fin de ciclo deriva de una crisis, existe esa necesidad que no debe ser soslayada. Y por eso la responsabilidad con que debe asumirse este partido, más allá de que la exigencia real comenzaría recién el miércoles (ver "Desde la tribuna"). El fútbol en general, y el argentino en particular, es muy cruel con los entrenadores. Parece mentira que Torrente debiera irse luego de no ser superado por ningún rival, ni siquiera el gallardo puntero del campeonato. Pero tampoco fue más que ninguno, le faltó gol pese a crear en general situaciones en cantidad suficiente y se fue. Y entre los intentos por Gerardo Martino y algún otro, se fue el tiempo que Diego Cagna creía conveniente para asumir ya en esta fecha. Por eso el breve interinato de Giovagnoli. Y el técnico que hará el enlace con Cagna remarcó ayer a Ovación, ni bien llegó el plantel a Buenos Aires, "que ninguno fue superior a Newell's" y sabe que "la parte anímica será muy importante". Y en ese sentido confió en que, pese a que "es un mal momento para los jugadores, lo importante es que están a la altura de las circunstancias y muy comprometidos". En ese sentido, tiene fe que "en algún momento Newell's va a empezar a ganar", aunque admitió que para lo que vendrá, hoy un punto no sería tampoco mal visto en el Parque. Newell's se instaló ayer en un hotel capitalino de calle Suipacha con 18 jugadores y una sola duda: Pablo Pérez o Víctor Figueroa, que recién definiría mañana (ver Apostileprosas). Sí ya es seguro que Alexis Machuca entrará por Hernán Villalba, que Sebastián Vergini acompañará a Hernán Pellerano de zaguero central y que Diego Mateo volverá a la mitad de cancha junto a Lucas Bernardi. Este Newell's de Giovagnoli tratará de tenderle un buen puente a Cagna, en quien se depositó la confianza para el resurgimiento.
No hay comentarios:
Publicar un comentario